En la actualidad que vivimos decir o dar discursos de que la educación en México se encuentra bien seria como contar una vez más la historia de pinocho y sus mentiras. Vivimos en una época donde el tema de moda actual es la reforma educativa la cual se ha vendido como un
cuento barato donde el final feliz seria: una educación de calidad en donde se buscara
un mejoramiento constante y máximo del logro educativo de los estudiantes.
En
este cuento el “príncipe” nos promete que el rey, quien vendría hacer el estado
es quien garantizara los materiales, métodos educativos, la organización escolar y la infraestructura del pueblo.
Pero si dentro de las promesas de esta reforma se encuentra una privatización
de la escuela, entonces las promesas ya
antes dadas por el principe serian mentira y no habría ni final feliz…
Al igual en esta reforma se habla sobre una escuela de tiempo completo,
donde el futuro de México recibirá clases de 8 de la mañana a 5 de la tarde,
lo cual será para beneficio de las madres que trabajan y no tienen en donde
dejar a sus hijos. ¿Pero cómo esto beneficiaria la educación de los estudiante? Si de por sí, con solo 6 horas dentro de la escuela, contando el receso y las horas de clases a los niños se les hace tan tedioso, imagínense como será para ellos
estar 4 horas más.
Como sabemos miles de
evaluaciones se han efectuado, en las
cuales se han clasificado a los maestros
en los rangos de: excelente, destacado, suficiente e insuficiente, en una evaluación supuesta buena. Pero si nos ponemos a evaluar la reforma
educativa, es claro decir que su rango determinado sería el de insuficiente, a
lo que nos lleva a preguntarnos ¿Cómo una evaluación tan insuficiente,
determina quien es suficiente? Evaluar a los profesores no solo es el problema de
esta supuesta evaluación que se encuentra inmersa en la reforma educativa, si no como se
lleva a cabo y bajo qué condiciones, pues como lo dijo el mismo Secretario de
Educación Aurelio Nuño, la evaluación
presento grandes deficiencias, por lo tanto la reforma en si misma también las presenta.
En esta reforma también se habla de las escuela de tiempo completo que es solo una copia de los sistemas educativos de otros países desarrollados que actualmente la implementan, pero
también hay que tomar en cuenta la situación del país, la infraestructura de sus instituciones y del plan curricular de ellos, ya que a diferencia de el nuestro que
solo es de impartir conocimientos, ellos cuenta con actividades
extracurriculares que les permite que las clases no sean tan tediosas y
aburridas.
Propuesta
Si en realidad queremos una
educación de calidad, todo lo relacionado a ella debe ser igual de
calidad. Una propuesta concreta es tomar
con seriedad que la educación de nuestro país
no es solo el problema de los maestros ni de la escuela en la que asisten
sino de toda la sociedad en conjunto.
Al igual tomar en cuenta que
los profesores que tienen más conocimientos no son los excelente, pues “Es
mejor Una cabeza bien puesta, que una repleta de conocimiento” (Morín, 1979). Lo cual quiere decir que de nada sirve tener
mucho conocimiento si no sabes hacer uso de este. La reforma educativa
significaría no solo evaluar a los maestros o administrativos sino al propio
sistema y aun mayor a nosotros mismos.
Al igual se abría de pensar como reformar la
educación, y de cómo lograr que los
planes, programas y libros de texto se adecuen y sean propicios al contexto en
que cada individuo vive y se desarrolla, pues por ende sabemos que la realidad
de un niño de la zona rural no es la misma que la de una zona urbana, ya que
estos no cuentan con las mismas posibilidades de vida.
Reflexiones Finales
Como ciudadanos deberíamos
entrar en debate, de quien es la culpa de la situación actual de nuestro país,
del gobierno, de los maestros o de nosotros mismos.
Es cierto que los problemas
y defectos de esta reforma son culpa del
gobierno de nuestro país, pero también de toda la sociedad en general,
pues existe una gran apatía por saber
cuáles son los problemas que acontece en la educación del país. Hay que tomar en
cuenta lo que decía en una de sus
ponencias, Díaz barriga (2016): La educación
es un acto intelectual y espiritual. Pero no hay que dejar de lado que
también representa un acto social, pues la escuela no es el lugar donde los niños
aprenden más, sino más bien en sus hogares y en el contexto donde ellos se
encuentran inmersos.
AL igual la educación de un niño de una
escuela rural y urbana no es la misma y en los libros gratuitos no pueden venir
los mismos contenidos. Por ejemplo en el libro de 6 grado de primaria de ciencias naturales viene
actividades donde se preguntan, ¿Cuáles son los ríos más grandes del mundo?,
¿Cuáles es su localización? O ¿Cuáles son los países más contaminados del
mundo? , para un niño de la zona urbana lo común sería ir a investigar en la
Wed o ir a alguna biblioteca, pero ¿cómo un niño de una zona rural que no
cuanta con un una computadora, un centro de computo cerca, ni internet, una biblioteca y menos servicio de luz como seria capaz de realizar este tipo de actividades? Tal vez estos libros son iguales pero no justos.
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